Editorial Semana
Alteraciones genéticas y malformaciones en el embarazo

Por: Editorial Semana, Inc.
En los últimos 20 años, especialmente en países desarrollados- ha crecido la tendencia entre las mujeres de postergar la maternidad en pro de otros planes de vida. En consecuencia ha aumentado la edad de embarazo por sobre los 30 años.
La edad es un factor que efectivamente aumenta el riesgo de algunas enfermedades del embarazo,incluyendo las alteraciones genéticas y las malformaciones. Uno de cada 33 bebés en los Estados Unidos nace con un defecto congénito, un problema que ocurre mientras se desarrolla el bebé en el cuerpo de la madre. La mayoría ocurren durante los primeros tres meses del embarazo.
Es importante, sin embargo, tener claro que la probabilidad de tener una malformación es del orden de entre 1% al 2% y en cuanto a Síndrome de Down también del orden del 1%. Por tanto, conocer que hay un 97% de posibilidades de que todo esté en orden, debe ser la premisa.
Hay algunas malformaciones que se pueden prevenir; las más conocidas son las malformaciones de columna y del cerebro. Por ejemplo el cierre inadecuado de la columna produce espina bífida y esa patología del sistema nervioso central puede ser prevenida tomando ácido fólico en las primeras etapas del embarazo, pues se asocia precisamente un déficit de este elemento.
El resto de las malformaciones no tienen un mecanismo tan fácil de prevención, pero por ejemplo, para malformaciones cardíacas, que corresponden más o menos al 1% de los embarazos, cuando la madre o el padre cuentan con antecedentes de malformaciones cardíacas, se pone un cuidado especial para detectar precozmente la malformación mediante ecografía y lograr un maneja adecuado.
Las primeras ecografías son claves en la detección de problemas genéticos como el síndrome de Down y también evaluar la presencia de algunas malformaciones mayores. A esas alturas el feto mide sólo 6 a 8 cms. por lo que hay órganos que aún no se pueden ver con detalle, pero hay otros órganos que sí se puede evaluar a esa altura y estar tranquilos.
Por ejemplo, se ve si el cráneo está bien cerrado, si existen las cuatro extremidades, si el corazón tiene las cuatro cavidades que debe tener, o si no hay problemas en el cierre del abdomen.
La siguiente ecografía importante es alrededor del quinto mes y en ella se vuelve a revisar toda la anatomía. Permite evaluar la presencia de malformaciones mucho más sutiles o pequeñas, como soplos pequeños al corazón, que las manos tengan todos sus dedos, labio leporino y pequeñas alteraciones del sistema nervioso o a veces no tan pequeñas como la hidrocefalia.
Atención, prevención y control, pero sobre todo: tranquilidad.
También hay que saber que algunas enfermedades de la madre aumentan el riesgo de malformaciones, como por ejemplo la diabetes y sobre todo la diabetes mal controlada, Por eso, en las primeras semanas de embarazo se pide una serie de exámenes a la madre para determinar alguna de estas enfermedades que pueden afectar a la criatura. Si se detectan y se manejan bien, disminuyen los riesgos en esa etapa.
Tomando todas esas precauciones, es muy poco probable que haya problemas que no se puedan detectar.
No todos los defectos congénitos se pueden prevenir, pero hay cosas que puede hacer antes y durante el embarazo para aumentar sus posibilidades de tener un bebé sano.
Comience la atención prenatal tan pronto como piense que podría estar embarazada y vea seguido a su profesional de la salud regularmente durante el embarazo. Tome 400 microgramos (mcg) de ácido fólico todos los días. Si es posible, debe comenzar a tomarlo al menos un mes antes de quedar embarazada. No beba alcohol, fume ni use drogas ilegales. Hable con su profesional de la salud sobre cualquier medicamento que esté tomando o piense tomar. Esto incluye medicamentos recetados y de venta libre, así como suplementos dietéticos o herbales.
Consulte con su médico cómo prevenir las infecciones durante el embarazo. Si tiene alguna afección médica, intente controlarla antes de quedar embarazada.