top of page
Buscar
Foto del escritorEditorial Semana

Deseos de bien y paz




Por: Myrna L. Carrión Parrilla


Todos conocemos que cada incidente que surge en Estados Unidos nos impacta de manera significativa, pero el más reciente impacta al mundo y muchos son los asuntos planteados a nivel mundial, pero que sin duda es de reflexión para todos.


Ha sido más que comentado este incidente del pasado sábado. Como expresó un periodista de CNN “Los hechos del sábado pasado ponen fin a un período de 43 años sin intentos de magnicidio en Estados Unidos, desde que John Hinckley hirió al presidente Ronald Reagan en marzo de 1981”.


Magnicidio es una muerte violenta que se da a una persona muy importante por su cargo o poder. Sin duda, el atentado contra el ex presidente Donald Trump, conmocionó al mundo político y a la opinión pública estadounidense, pero no sorprendió a nadie, comentan algunos medios. La realidad, por mucho tiempo la violencia política ha formado parte del escenario público de Estados Unidos, donde cuatro de sus 46 presidentes han sucumbido a las balas.


En la historia del pueblo norteamericano, han vivido los asesinatos de los presidentes Lincoln, Garfield, McKinley y Kennedy. Cuatro presidentes más han sobrevivido atentados contra sus vidas en suelo estadounidense, un candidato presidencial cayó abatido por las balas y tres más, dos de ellos expresidentes, fueron heridos en intentos de asesinato quedando uno de ellos parapléjico. Esta triste historia es el reflejo de muchas cosas en una sociedad que enfrenta grandes retos sociales relacionados con conductas violentas, visión sobre el acceso a las armas, como muchas naciones, enfrentan una crisis en la salud mental del pueblo y para no dejar de tener elementos que abonen, una figura de un ex presidente cuyas actitudes, temperamento y acciones en general son violentas, atentan contra la dignidad de los seres humanos y carecen de los más elementales principios de respeto y caridad.


Soy de los que valoran y respetan la vida, por lo que entiendo que nada justifica la violencia contra los demás y mucho menos considerar o intentar quitarle la vida a nadie, provoquen o no, pero hay que vivir con los pies en la tierra y aceptemos que cada día más, muy lamentablemente, algunos seres humanos entre tantas crisis que vivimos han permitido que su lado animal actúe previo al humano.


Podríamos diferir o no en cuanto a la visión sobre cómo fue la ejecución como presidente del señor Trump y si en un balance, fue más o no lo que aportó, pero con mucho respeto invito a evaluar seriamente si es correcto y en algo abona, que una figura que impacta la vida de todo un pueblo debe aceptársele insultar e incitar a la violencia, acciones que sólo enferman más al pueblo.


Con el mejor deseo para todos aquellos que se ponen a la disposición de servir al pueblo, invito a la reflexión y a unirnos en deseos de bien y paz.

6 visualizaciones

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page