La composta como alternativa para disponer los restos humanos

Redacción Editorial Semana

En los últimos años, convertir cadáveres en composta pasó a ser una novedosa alternativa para proteger el planeta, al constituirse como método natural al sepelio y la cremación para disponer los restos humanos.

La composta humana, también denominada ciclo de reducción orgánica, se acerca bastante al ciclo natural de la vida. Este proceso usa elementos naturales como pedazos de madera, abono y flores silvestres para convertir el cuerpo del ser querido en suelo rico en nutrientes. En cuestión de semanas, el suelo restante puede devolverse a la tierra.

Para preparar a la persona difunta para esta transformación, se lava y se viste con un manto biodegradable. Se identifica con una prenda y luego se coloca en una capa de abono orgánico y trozos de madera en una vasija designada específicamente para composta. Flores silvestres locales se esparcen sobre el cuerpo de la persona antes que se selle ese vaso.

Entonces, con un poco de agua, un poco de calor y un balance adecuado de carbono, nitrógeno y oxígeno, se crean las condiciones perfectas para que los microorganismos desintegren el cuerpo y lo conviertan gentilmente en suelo. La osamenta y la dentadura no se rompen y se reducen a un polvo fino antes de devolverse al suelo. El tiempo aproximado de este proceso es de 45 días.

Cada envase reciclable y biodegradable hecho para la composta tiene capacidad de 32 onzas y está diseñado para almacenar el suelo de su ser querido hasta que se pueda regar o sembrar.