Redacción Editorial Semana
El Municipio de Caguas informó que firmó un contrato de alquiler con opción a compra del histórico Teatro Alcázar. Este emblemático espacio se transformará en una escuela vocacional de teatro, abriendo nuevas puertas para muchos jóvenes. El proyecto estará a cargo de Nuestra Escuela, una organización sin fines de lucro dedicada a ofrecer nuevas oportunidades educativas a jóvenes y adultos.
Inaugurado en la primera mitad del siglo XX, el Teatro Alcázar fue construido por los hermanos Manuel y Luis Pérez. Se destacaba por su arquitectura con estilo Art Deco y por ser un importante centro de entretenimiento y cultura que servía como un punto de encuentro tanto para los residentes de la Ciudad Criolla como para los pueblos circundantes. Ubicado en la calle Betances, frente a la Plaza Palmer, en sus años de gloria ofrecía funciones de cine y espectáculos en vivo, además de ser utilizado para graduaciones y otros eventos sociales. Entre las muchas figuras que llegaron a presentarse en esta sala se encuentran los destacados cantantes Tito Rodríguez y Lucecita Benítez. En su pantalla se presentaron grandes producciones cinematográficas, incluyendo películas de Hollywood y del cine latinoamericano.
Su legado como parte del patrimonio cultural de Caguas ha persistido, y es recordado por su impacto en la vida social y cultural de la ciudad. En la memoria colectiva de varias generaciones de cagüeños se preservan recuerdos de las producciones cinematográficas que allí se exhibieron y los espectáculos a los que sirvió de escenario.
El predio de la Plaza frente al antiguo Teatro Alcázar, conocida en los años 40 y 50 del siglo 20 como “La Esquina de los Flanes”, era el epicentro del entretenimiento en Caguas y lugar de encuentro entre los jóvenes. Los domingos, la rutina de muchos era ir temprano a Misa, luego al matineé en el Alcázar y por la noche a compartir en esa esquina.
El Teatro Alcázar cesó funciones en el año 1972, aunque manteniendo en su fachada en los años subsiguientes las famosas letras que lo identificaban como tal. Sin embargo en algún momento algún fenómeno atmosférico le arrancó la R y el resto se lo llevó el huracán María en el 2017. Su historia, sin embargo, no ha podido ser arrancada. Poco después de dejar de operar como teatro, su estructura sirvió por varios años como local para diversas tiendas, hasta entrada la segunda década de este siglo 21.
Nuestra Escuela se destaca por su innovador enfoque para abordar el problema del abandono escolar, brindando servicios educativos y de apoyo a jóvenes y adultos de entre 13 y 21 años que no han completado el cuarto año de escuela superior. Hasta la fecha, han atendido a 1,592 jóvenes, de los cuales 1,238 se han graduado exitosamente. El 52% de sus graduados ha continuado con estudios postsecundarios y el 34% ha ingresado al mundo laboral.
Este nuevo proyecto con el Teatro Alcázar permitirá seguir impactando positivamente en la vida de muchos más jóvenes, ofreciéndoles herramientas y recursos para su desarrollo personal y profesional.
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