Editorial Semana
Necesitamos líderes

Por: Myrna L. Carrión Parrilla
Desde cierto tiempo para acá hay un sentimiento generalizado de que en nuestro país se han perdido los líderes, al menos aquellas figuras inspiradoras que lograban mover las masas, convencer, hacer que en ellos se confiara, que provocaban un fuerte deseo de seguirles, que provocaban cambios y lograban resultados de alto significado, con un don de palabra tal que lograban llevar mensajes e invitaban a la lealtad. Es eso quizás lo que el pueblo extraña.
Dice Milagros Zegarra que “ Un líder inspirador, es quien te impulsa a llegar, a donde jamás soñaste, ni hubieras llegado solo”. Y según Simon SineK, “el liderazgo no consiste en estar al mando, sino en cuidar de las personas a tu cargo”.
Si buscamos la definición de liderazgo encontramos que es la capacidad que se tiene de motivar y conducir a un grupo de personas hacia el logro de un objetivo común. El liderazgo es un conjunto de habilidades que sirven para influenciar en la manera de pensar o de actuar de otras personas. Un líder además es aquel capaz de establecer una buena comunicación y mejorar la capacidad de integrarse entre los miembros de un grupo o equipo de trabajo.
Entre las definiciones de líder se nos dice que “un líder es una persona que dirige a un grupo, desde un equipo, hasta la población de un territorio, y que tiene la capacidad de influenciar, estimular e incentivar a los integrantes para dar lo mejor de cada uno, con el propósito de alcanzar los objetivos comunes”. Quienes estudian el tema plantean algunas cualidades indispensables de un líder, entre ellas: *Tener un pensamiento positivo, esto le hace ver de cada situación no un problema y si un aprendizaje. *Saber delegar, confía en sus colaboradores, evita el “micro manegement”. * Ser honesto, la verdad es fundamental. Si bien la realidad puede ser dolorosa el verdadero líder sabe llevar el mensaje sin herir, pero sin mentir. * Escucha activamente, y promueve la buena comunicación, esto le permite entender la posición de otros, conoce mejor a los miembros del equipo y como pueden mejor aportar a fin común. * Tiene la capacidad de inspirar al grupo al cual lidera. Parte de su rol es transmitir pasión y conexión entre aquellos que lidera. *Fomenta el crecimiento y es el guía. El líder promueve el crecimiento de otros y no impone, sino que guía. *Es confiable, su palabra y su acción son claros y cónsonas, actúa por encima de intereses particulares con integridad y transparencia. *Se expresa con claridad y su palabra inspira y motiva. *Promueve la transformación dejando a un lado su interés personal.
La realidad es que llamamos lideres a todos aquellos que ocupan alguna posición ya sea de jefatura o de toma de decisiones en empresas y gobierno, pero, aunque la posición provoca que esperemos la ocupen lideres, no necesariamente los son, pues la posición en sí no determina que lo sean.
La pregunta es cuantos de aquellos que llamamos lideres cumplen con todas o la mayoría de las cualidades identificadas para serlo. ¿Seleccionamos lideres para las posiciones o en las posiciones escogemos gente en posiciones para luego llamarle lideres? Aquellos lideres que alguna vez tuvimos, letrados, con un amplio contenido cultural y académico, que transmitían pasión, movían mentes y corazones, con gran compromiso, no es lo que necesariamente vemos en la actualidad en muchos de los puestos de gran responsabilidad. Sin duda con el futuro hay que trabajar pues necesitamos lideres.