
Por: Prof. Luis Dómenech Sepúlveda
Definitivamente, una vez más ha quedado demostrado que el deporte constituye uno de los eventos no solamente más apasionados y gratificantes, sino también, uno de los pasatiempos más influyentes para el sentimiento patrio, la identidad nacional y el sentido de pertenencia de los puertorriqueños. Basta recordar el derroche de identidad y puertorriqueñidad manifestada el pasado domingo, 7 de julio de 2024, cuando nuestro Equipo Nacional de Baloncesto Masculino derrotó, ante más de 14,000 personas en el Coliseo José Miguel Agrelot, al poderoso equipo de Lituania logrando, de ese modo, su clasificación para los Juegos Olímpicos “París 2024”. Ello, tras 20 años de ausencia del prestigioso certamen deportivo. Ese día demostramos que somos un pueblo profundamente comprometido con nuestras raíces antillanas, caribeñas y latinoamericanas. Dicha victoria nos convirtió, además, en uno de los pocos países en la historia de los Juegos Olímpicos en cualificar a sus dos Equipos Nacionales (masculino y femenino) en la competitiva disciplina del baloncesto internacional.
Por supuesto, no podemos menos que felicitar, sobre todo, a los “doce magníficos” que conforman nuestro Equipo Nacional, nueve de los cuales son puertorriqueños nacidos, criados y desarrollados en Estados Unidos, pero que están activos en el Baloncesto Superior Nacional de Puerto Rico. De hecho, más de 40 jugadores con nombres anglosajones han sido declarados elegibles para jugar como nativos en el BSN por tratarse de hijos o nietos de madres y abuelos puertorriqueños. ¡Señales de los tiempos!
Puerto Rico, aun con su condición colonial, debutó en el deporte internacional en 1930 en ocasión de los 2dos Juegos Centroamericanos y del Caribe celebrados en La Habana, Cuba. A partir de entonces, Puerto Rico se ha mantenido activo ininterrumpidamente en todos los Juegos Centroamericanos y del Caribe. En 1948, el Comité Olímpico Internacional (COI) nos reconoció como “Ente deportivo con personalidad propia” y como tal, surgió nuestra primera participación en Juegos Olímpicos celebrados en Londres 48. Naturalmente, nuestra delegación desfiló con la bandera olímpica dado que nuestra bandera había sido proscrita por Estados Unidos. No obstante, la bandera puertorriqueña fue desplegada por todo lo alto en los Juegos Olímpicos de Helsinki en 1952 al ser reconocida como bandera oficial de los puertorriqueños. Desde entonces, Puerto Rico ha participado en todas los Juegos Olímpicos, incluidos los Juegos Moscú 1980, boicoteados por EEUU por la invasión a Afganistán, hasta los presentes Juegos de París 2024. Además, Puerto Rico había debutado en los Juegos Panamericanos en 1955 manteniendo su participación ininterrumpidamente hasta los Juegos de “Chile 2023”.
Conviene destacar que otros países no soberanos (Aruba, Bermudas, Islas Vírgenes, Islas Caimán, Taiwán, Hong Kung y Guam, entre otros), fueron igualmente admitidas al movimiento olímpico por tratarse de “entes deportivos con personalidad propia”. Sin embargo, a partir de 1996, el COI optó por cerrarle las puertas a otros países no soberanos.
Pregunta: ¿Puede Puerto Rico conservar su propio Comité Olímpico de convertirse en Estado? Todos los análisis indican que no porque ello atentaría contra la unidad nacional de Estados Unidos.
Comments