Editorial Semana
Sabor cagüeño en la Premiación Olímpica

Por Jorge L. Pérez/JPG Media Group
Fotos Pepo Pereira/Municipio de Caguas
La tradicional Premiación Olímpica, donde el Comité Olímpico de Puerto Rico (COPUR) celebra los logros alcanzados por sus mejores atletas, tuvo este año un sabor cagüeño.
En la actividad celebrada en horas de la tarde del sábado 28 de enero en las instalaciones del Conservatorio de Música de Puerto Rico en Santurce, tres atletas del Turabo recibieron sus trofeos como los mejores de sus respectivos deportes, según escogidos por sus federaciones.
Además, en la actividad se otorgó también el Premio William Miranda Marín, Valor Humano, que lleva el nombre del ilustre alcalde cagüeño.
Este premio fue presentado por el reconocido ortopeda Luis Miranda Torres, hijo de Miranda Marín y hermano del alcalde William Miranda Torres, además de ser un perenne colaborador del Copur como médico de sus delegaciones.
El premio le fue conferido al niño de siete años Diego Rivera, quien, en una carrera de campo traviesa celebrada en Cayey, conmovió al país gracias a una foto en la que aparece ayudando a levantarse y luego acompañando hasta la meta al rival con el que venía disputando la delantera.
“Cuando vi que el nene se había caído, llegué hasta la meta pero entonces regresé para ayudarlo a que se levantara y lo ayudé a llegar hasta la meta”, dijo al ser entrevistado en tarima por la propia presidenta del Copur, Sara Rosario, durante la ceremonia.
“Lo hice de corazón”.
El estelar gimnasta José ‘Gussie’ López repitió como la figura más destacada de la gimnasia masculina; el especialista en tiro con rifle Luis Mendoza fue reconocido por cuarta vez como el mejor tirador masculino del país, y el boxeador juvenil Juanma López recibió a su vez su primer reconocimiento como el boxeador masculino más destacado del año.
Los tres coincidieron en recalcar que es un premio que les sirve para probarles el significado de su esfuerzo del año anterior, y darles un espaldarazo de estímulo para el próximo capítulo de sus carreras.
“Me siento muy honrado”, dijo Mendoza, que ya clasificó para los Juegos Centroamericanos de junio en San Salvador.
“Es bueno saber que lo reconocen a uno por el esfuerzo que ha hecho en todo el año”.
Mendoza compitió en los Centroamericanos de 2018 y los Panamericanos y el Mundial de 2019, y en 2022 revalidó como campeón nacional.
Para los Centroamericanos de San Salvador, Mendoza clasificó en junio en un clasificatorio celebrado en Guatemala y para los Panamericanos de octubre en Chile clasificó en unas competencias celebradas en Lima en noviembre.
“Es algo que sirve de estímulo para seguir adelante”, dijo por su parte Gussie, también clasificado para los Centroamericanos, que compite en ‘All Around’.
Gussie estuvo en los Centroamericanos de 2018 y los Panamericanos y el Mundial de 2019 y este año revalidó como campeón nacional y ayudó a que todo el equipo masculino activo en los Panamericanos de Gimnasia celebrados en julio en Brasil, clasificara para los Centroamericanos de este año.
Por su parte, Juanma, de 18 años, tuvo en 2022 su año de consagración cuando en noviembre conquistó la medalla de bronce de las 112 libras en el Mundial Juvenil celebrado en España.
“Es un orgullo que reconozcan lo que uno hace por Caguas y por el país”, dijo el hijo del dos veces campeón mundial, Juan Manuel ‘Juanma’ López.
Como sea, Juanma salió de la actividad con dos nuevos recuerdos: una placa y un trofeo, en reconocimiento de la medalla obtenida en el Mundial y haber sido seleccionado a la Premiación.
Y ambos se unirán a su colección, cada vez más cuantiosa.
“Tengo como 20 trofeos”, dijo, “pero hay que recordar que ya tengo 80 peleas”.
“Pero estos son los más significativos”.
Mendoza, naturalmente, ya apenas tiene espacio para más premios.
“Tengo muchos trofeos y, medallas, debo tener más de 100”, dijo. “Pero las medallas no las tengo en ‘display’, sino colgadas de un gancho”, agregó, riendo.
Gussie también calcula su botín en entre 40 trofeos y 100 medallas.
“Los tengo en mi cuarto, en unos tabloncillos”.
La ceremonia fue la 56 Premiación Olímpica, y entre las figuras reconocidas se encontraron la tenimesista Adriana Díaz -quien no se encuentra en el país- y la voleibolista Neira Ortiz, quien recibió su trofeo como la voleibolista más destacada de manos de su padre, el legendario baloncelista José ‘Piculín’ Ortiz.
Esos son otros dos que ya no deben tener espacio para guardar sus trofeos.