Por: Emmanuel Hernández,
Michelle Berrios & Legna Fermaint
Especial para Editorial Semana
El sobrepeso y obesidad niñez es un problema social que está en aumento en Puerto Rico, con un alto número de niños y niñas siendo afectados por esta condición. Según datos del Departamento de Salud de Puerto Rico publicados en el 2019, entre 18% y 24% de la niñez de la isla sufre de sobrepeso u obesidad. Estas cifras preocupan a los profesionales de la salud y las autoridades, ya que, tanto el sobrepeso como la obesidad en la niñez, pueden tener consecuencias negativas en su salud actual y futura.
El sobrepeso y la obesidad en la niñez puede estar relacionado con diferentes factores, como la falta de actividad física, alimentación poco saludable y, en ocasiones, el poco acceso a alimentos nutritivos. También se asocia con factores socioeconómicos, ya que las familias de bajos ingresos a menudo tienen dificultades para obtener alimentos saludables y nutritivos por el costo elevado de los mismos.
En cuanto a la salud, tener sobrepeso u obesidad en la niñez aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y problemas musculo esqueletales, lo que antes no se observaban en la niñez. Además, el sobrepeso y la obesidad en la niñez pueden crear problemas de salud mental, como la baja autoestima y la depresión.
Es necesario considerar los riesgos relacionados al sobrepeso y la obesidad en la niñez para garantizar un futuro saludable en Puerto Rico.
A largo plazo, hay un mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas en la edad adulta y de convertirse en adultos obesos, lo que aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, la hipertensión y el cáncer. Por esta razón, se deben considerar mecanismos de prevención y estrategias de educación relacionadas a fomentar estilos de vida saludables en la niñez en Puerto Rico y mejorar su calidad de vida.
Es necesario educar a los padres, madres y/o personas cuidadoras sobre la importancia del modelaje en comportamientos saludables para sus hijos e hijas, especialmente en comportamientos activos. El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos creó una campaña para la participación en actividades físicas, deportes y actividades recreativas en la cual se resalta el rol de la familia en el nivel de actividad física de los niños y niñas. Algunos ejemplos de actividades físicas que se pueden hacer en familia son correr bicicleta o jugar baloncesto y con esto se puede hacer la diferencia en la salud de la niñez.
El sobrepeso y la obesidad en la niñez son un gran desafío en Puerto Rico, que demanda acciones concretas por parte de los y las profesionales de la salud, entidades públicas y privadas y la sociedad en general. Es importante trabajar juntos y juntas para crear entornos favorables que promuevan estilos de vida saludables y reduzcan los riesgos asociados con el sobrepeso y la obesidad en la niñez. Con compromiso y dedicación, Puerto Rico puede superar el desafío del peso no saludable y construir un futuro con mejor calidad de vida para las próximas generaciones.
Esta columna fue resultado de una colaboración con estudiantes del Programa de Maestría en Educación en Salud, de la Escuela Graduada de Salud Pública Recinto de Ciencias Médicas, Universidad de Puerto Rico.
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