Por: Prof. Luis Dómenech Sepúlveda
Nota: Nos complace ceder nuestro espacio de hoy al compañero, Lic. Raúl Tirado. A continuación su escrito:
Le agradezco a Luis Domenech Sepúlveda la gentileza de permitirme usar su espacio en este rotativo dedicado a analizar la situación social, economica y política de nuestro país.
Me topé con unas expresiones del Representante a la Cámara, Hon. Jesús Santa Rodríguez, y del Gobernador del ELA, Hon. Pedro Pierluisi Uurrutia, sobre sus gestiones en relación con la Junta de Control Fiscal, en adelante la Junta, y cómo, según ellos, conducirán a la terminación de sus gestiones en la Isla. El primero, aludió a su intervención en la confección del presupuesto general de gastos como presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara durante el cuatrienio “mano a mano con la Junta” logrando la aprobación de “cuatro presupuestos balanceados consecutivos”. El otro, junto a seis economistas, informaba que bajo su administración “antes de que finalice este año publicarán el quinto estado financiero auditado del gobierno para “estar al día”. Y abundó que, “si todo sigue en orden, y cumpliendo con los parámetros fijados por el gobierno de los Estados Unidos mediante PROMESA, para mediados del 2026 pudiera solicitar la disolución de la Junta”.
Las expresiones del primero fueron despachadas por el Director Ejecutivo de la Junta al domingo siguiente en una entrevista publicada por el Nuevo Día negando que “el gobierno de Puerto Rico hubiese sometido, no cuatro como dijo aquél, sino tres presupuestos consecutivos balanceados” a la consideración del organismo colonial. Las del otro las despachó la Junta en pleno en una carta que le dirigió el 26 de febrero de 2021, indicándole, entre muchas cosas, que “la institucionalización de la responsabilidad fiscal depende en parte de que el Gobierno tome tres medidas adicionales y cruciales en el futuro inmediato”, y una de ellas es la presentación de los Informes Auditados, pero eso no tiene nada que ver con que las funciones plenipotenciarias de la Junta cesen.
En resumen, que la Junta seguirá ejerciendo sus poderes plenarios sobre el gobierno del ELA por los años venideros porque su propia Ley Habilitadora dispone en la Sección 209 que la Junta terminará sus labores cuando certifique que Puerto Rico: (1) “tiene acceso adecuado a los mercados de crédito a corto y largo plazo a tipos de interés razonables para satisfacer [sus] necesidades de endeudamiento;” (2) durante al menos cuatro años fiscales consecutivos, “el gobierno territorial haya desarrollado sus presupuestos de acuerdo con las normas de contabilidad de acumulación modificadas”, y (3) “los gastos realizados por el gobierno territorial durante cada ejercicio no exceden sus ingresos durante ese año, según se determine de acuerdo con las normas de contabilidad de acumulación modificadas.” (Carta de la Junta al Gobernador de febrero de 2021).
Por lo tanto, podrán aprobarse algún día cuatro presupuestos balanceados, pero la Junta no se irá. Debemos ser más críticos con las expresiones públicas que se hacen con la finalidad de seguir vendiendo fantasías.