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El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) es una afección de salud mental común en la que una persona tiene pensamientos obsesivos y comportamientos compulsivos. Puede afectar a hombres, mujeres y niños. Algunas personas muestran síntomas temprano, a menudo alrededor de la pubertad, pero generalmente comienzan durante la edad adulta temprana. Este trastorno puede interferir significativamente con tu vida, pero el tratamiento puede ayudarte a mantenerlo bajo control.
Si tiene TOC, por lo general experimentará pensamientos obsesivos frecuentes y comportamientos compulsivos. Una obsesión es un pensamiento, una imagen o un impulso no deseado y desagradable que entra repetidamente en su mente, causando ansiedad, disgusto o malestar. Una compulsión es un comportamiento repetitivo o un acto mental que sientes que debes hacer para aliviar temporalmente los sentimientos desagradables provocados por el pensamiento obsesivo.
Por ejemplo, alguien con miedo obsesivo a que le roben puede sentir que necesita verificar varias veces que todas las ventanas y puertas estén bien cerradas antes de poder salir de su casa.
Las mujeres a veces pueden tener TOC durante el embarazo o después del nacimiento de su bebé. Las obsesiones pueden incluir preocuparse por lastimar al bebé o por no esterilizar correctamente los biberones. Las compulsiones pueden ser cosas como verificar repetidamente que el bebé esté respirando.
Las personas con TOC a menudo son reacias a buscar ayuda porque se sienten avergonzadas o avergonzadas El TOC es una condición de salud como cualquier otra, por lo que no hay nada de qué avergonzarse.
Consulte a un médico de cabecera: le preguntarán acerca de sus síntomas y pueden derivarlo a un servicio local de terapias psicológicas si es necesario.
Es poco probable que el TOC mejore sin el tratamiento y el apoyo adecuados.
Tratamientos para el trastorno obsesivo compulsivo
Existen algunos tratamientos efectivos para el TOC que pueden ayudar a reducir el impacto que tiene en su vida.
Los principales tratamientos son:
Terapia psicológica: generalmente terapia cognitiva conductual (TCC), que lo ayuda a enfrentar sus miedos y pensamientos obsesivos sin “corregirlos” a través de compulsiones.
Medicamento: generalmente un tipo de medicamento antidepresivo llamado inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS), que puede ayudar al alterar el equilibrio de las sustancias químicas en el cerebro.
Por lo general, la TCC tendrá un efecto bastante rápido. Pueden pasar varios meses antes de que note los efectos del tratamiento con ISRS, pero la mayoría de las personas eventualmente se beneficiarán. Si estos tratamientos no ayudan, es posible que le ofrezcan un ISRS alternativo o una combinación de ISRS y TCC.
Algunas personas pueden ser derivadas a un servicio de salud mental especializado para recibir tratamiento adicional.
Causas del trastorno obsesivo compulsivo (TOC)
No está claro qué causa el TOC. Varios factores diferentes pueden jugar un papel, incluyendo:
Antecedentes familiares: es más probable que lo desarrolle si un miembro de la familia lo tiene.
Diferencias en el cerebro: algunas personas con TOC tienen áreas de actividad inusualmente alta en el cerebro o niveles bajos de una sustancia química llamada serotonina.
Acontecimientos de la vida: puede ser más común en personas que han sido acosadas, maltratadas o desatendidas, y a veces comienza después de un acontecimiento importante de la vida, como el parto o el duelo. Personalidad: las personas ordenadas, meticulosas y metódicas con altos estándares personales pueden tener más probabilidades de desarrollar TOC, también las personas que generalmente están bastante ansiosas o tienen un fuerte sentido de responsabilidad por sí mismas y por los demás.