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  • Foto del escritorEditorial Semana

El diesel y el barco con bandera extranjera


Por: Jennifer González Colón


Desde antes del huracán he estado en sesiones informativas continuas, múltiples veces al día, sobre el estado de los esfuerzos federales de respuesta y recuperación en la isla.


El combustible, en todas sus formas, es un tema prioritario para todos. Tanto para el gobierno federal, como estatal, es de primera importancia garantizar que haya suministros disponibles para satisfacer la demanda.


En todas y cada una de las reuniones, las agencias federales, incluido el Departamento de Energía, FEMA y el Cuerpo de Ingenieros me han asegurado que hay suministro adecuado de combustible en la Isla que está disponible para los consumidores y que hay planificado la entrega subsiguiente de más combustible a corto, mediano y largo plazo.


Tan reciente como el martes, FEMA realizó una conferencia telefónica a las 2:00 p. m. a los miembros del Congreso para ofrecer una actualización sobre los esfuerzos de la agencia en donde reiteró nuevamente que hay “un suministro considerable de combustible disponible en la Isla”.


Este asunto del barco viene a atender la falta de inventario de un suplidor, no de la industria en general y es de todos conocidos que zarpo sin antes hacer los debidos trámites ante el gobierno federal.


En los pasados días han entrado barcos de bandera americana provenientes de los puertos americanos y de bandera extranjera provenientes de puertos internacionales y continuarán llegando, tan pronto como esta misma semana.


La gran mayoría del combustible que consume Puerto Rico proviene fuera de los Estados Unidos, por lo cual es transportado en barcos con bandera extranjera, desde puertos extranjeros. Por lo cual no le aplica la Ley Jones y una dispensa no cambiaría en nada la forma en que se transporta el combustible.


Me mantengo en comunicación con agencias federales, solicitando acciones viables y medidas que el gobierno federal puede y debe tomar lo más rápido posible para ayudar a la gente de Puerto Rico a responder y recuperarse del huracán Fiona.


Desde un inicio, el proceso llevado a cabo por el suplidor ha sido uno atropellado y no coordinado con el gobierno. El gobierno estatal entendió que, a pesar de que no hay una crisis de abasto de diésel, se debían hacer las gestiones para subsanar los defectos del acarreo y solicitó al gobierno federal una dispensa para permitir la entrada del barco. Mi oficina ha estado en contacto tanto con el gobierno estatal, como con el federal para estar al tanto de dichos trámites.


El proceso para solicitar la dispensa a la Ley Jones requiere consultas con varias agencias federales, incluyendo Homeland Security, la administración Marítima, departamento de defensa entre otras. Ya ese proceso culminó y en los próximos días sino horas el Departamento de Homeland Security publicará su determinación.


El gobierno federal se encuentra evaluando la petición de dispensa, y determinará si la concede o no. Por el tiempo que toma evaluar y conceder una dispensa como esta.


Como ha estado desde antes que Fiona tocara tierra en nuestra isla, mi oficina estará pendiente de este y de todos los asuntos federales concernientes a Puerto Rico.

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